Solo: Crónicas salvajes (Recomendado ENE 2013)

Título: Solo: Crónicas salvajes

Autores: Oscar Martín (guión) y Raúl Moreno (dibujo)

Editorial: Ominiky

Páginas: 48 (Blanco y Negro)

ISBN: 978-84-939943-5-8

Formato: 22 x 31.Cartoné

Precio: 15,00 euros

Solo es un personaje creado por Oscar Matín y que hizo sus primeras apariciones a finales de los noventa. Heredero en cuanto a temática de otros héroes de futuros post-apocalípticos de nuestro cómic, como por ejemplo el clásico Hombre, de Ortíz y Segura, la principal característica de Solo es que está dotado de un dibujo caricaturesco (la mayoría de personajes son animales antropomorfos) y de un humor salvaje propios de los dibujos animados, un aspecto que siempre ha sido su sello de identidad. Con el paso del tiempo, se ha ido convirtiendo en un personaje de culto, con un número de seguidores cada vez mayor, y tras permanecer una pequeña temporada en el limbo, Oscar Martín decidió volver a Solo para disfrute y gozo de sus fans y de los que amamos los buenos tebeos. Prueba de la vitalidad del personaje son los dos últimos álbumes aparecidos este pasado año: Solo: Historias caníbales (una interesante recopilación de historietas breves realizada por diversos autores) y el álbum que nos ocupa, Solo: Crónicas salvajes.

En Solo: Crónicas salvajes volvemos al pasado del personaje, prácticamente al inicio de sus aventuras, lo cual no sólo le proporciona un trasfondo más elaborado y detallado, sino que además permite que la lectura de este álbum no suponga un handicap para nuevos lectores. Oscar Martín, que aquí únicamente se encarga del guión, añade nuevos aspectos al mundo de Solo y un buen puñado de personajes a la saga, y nos presenta una historia de destinos cruzados, en la que nos muestra como nuestras decisiones, por pequeñas e insignificantes que parezcan, para bien y para mal marcan no sólo la vida de los demás, sino también nuestro futuro. En esta ocasión el dibujo corre a cargo de Raúl Moreno (que ya participó en una de las historias de Solo: Historias caníbales), cuyo estilo, siendo fiel en espíritu al del creador de Solo, es más detallista en el trazo pero sin ser barroco ni recargado. Raúl Moreno , un debutante que esperamos tenga más oportunidades para demostrar sus capacidades, proporciona a los personajes una plasticidad y a las viñetas una vitalidad pocas veces vista, gracias a la cual la lectura de la historia fluye sin dificultad y la secuenciación es tan dinámica que en ocasiones parece que los personajes se muevan ante nuestros ojos, como si estuviéramos viendo una película y no leyendo un cómic.

Solo: Crónicas salvajes gustará sin duda a los fans del personaje, pero también es una lectura ideal para los que disfruten de historias llenas de acción con héroes solitarios como protagonistas, ya sea en universos madmaxianos, westerns crepusculares o mundos de fantasía medieval.